Probioticos: Su importancia en tu salud intestinal

Hoy les voy a compartir algo demasiado personal. De un año a acá mi rutina de vida se vió severamente modificada al comenzar con sintomas de SII (Síndrome de Intestino Irritable) también conocido como colitis nerviosa.

SII lo pacede 1 de cada 10 mujeres en México

Ésta experiencia me ha traido demasiado aprendizaje -y malestares, debo admitir- que me han permitido reafirmar que somos un todo, cuando algo falla, todo falla. Y si en éste camino puedo ayudar a que menos mujeres lo sufran de manera innecesaria y traumática como fue mi caso, estoy dispuesta a contarles cómo lo estoy venciendo.

Resulta que un buen día me levanté como de costumbre, a desayunar alimentos que habitualmente consumía sin ningún problema (debo aclarar que siempre priorizo la ingesta de más proteína y menos azúcares en mi desayuno y no soy alguien garnacha en general, o amante de la comida chatarra), he de confesar que era una consumidora compulsiva de cafeina en todas sus modalidades (tés, café de olla, café negro, lates con leche de soya, en fin…). Ese día fue distinto, porque todo eso que mi organismo recibía con singular alegría un buen día pasó a no tolerar nada. Ni bueno, ni malo, ni crudo ni cocido… Nada.

Duré días en los que de manera impredecible, eligiendo una dieta lo más magra y sana posible, a base de vegetales crudos, cero azucares y alimentos inflamatorios, en cualquier momento mi cuerpo podía empezar a sentir un malestar y dañarme el día por completo.

Después de meses de padecer, visitar médicos, y cambiar mi dieta por completo, no había nada que mejorara minimamente, hasta que un día tenía un malestar demasiado grande, sensación de nausea, malestar estomacal, incomodidad todo el tiempo, algo así como una gastroenteritis. El médico decidió recetarme antibióticos y ahí fue donde todo se tornó todavía peor.

Resulta que los antibioticos efectivamente eliminaron cualquier organismo vivo de mi intestino, incluyendo mi flora intestinal que, irónicamente, es justo lo que más necesitaba para lidiar contra éste padecimiento.

Después de meses de analizar posibles causas, mi diagnóstico fue Sindrome de Intestino Irritable (SII), y el veredicto era muy claro: es crónico y no tiene cura, sólo se puede tratar de reducir los síntomas.

Esa frase es cero alentadora cuando tu calidad de vida está dramaticamente deteriorada, no sales a comer a ningún lado, porque practicamente tienes una dieta súper estricta, dejas el café por completo y cualquier otra cosa que pudiera ser minimamente agresiva, y sientes que todo eso sirve para muy poco o nada.

SII o colitis nerviosa, es el padecimiento intestinal más común a nivel mundial y que en México 1 de cada 10 mujeres lo padece -demasiadas, diría yo- , muchas nisiquiera saben que lo padecen y es frecuente especialmente en mujeres jóvenes en edad reproductiva.

¿Las causas? Todo y nada a la vez… La comunidad médica indica que puede ser estrés, ansiedad, no dormir suficiente, una dieta inflamatoria o alta en grasas, consumo de tabaco, en fin…

Mi hipótesis es muy clara, en mi caso me queda claro que el detonante fue ansiedad derivada de un post trauma, que al ser el intestino algo así como un segundo cerebro, es lo primero que se ve afectado por nuestros pensamientos.

¿Los síntomas? Cada quien lo manifiesta de manera distinta, hay gente que presenta dolor abdominal frecuente, indigestión, nausea, cambios de motilidad intestinal, y es un círculo vicioso que deriva en más ansiedad, perdida de apetito y/o depresión.

Solamente me quedaba una sola opción: Decidí rehusarme a bajar mi estandard de vida a ese nivel tan poco «vivo» y ser alguien que se dedica a reducir síntomas sin atacar una causa real.

Es por eso que de la mano de escuchar a mi cuerpo a cada momento, mucho research, mucha meditación y control de mis pensamientos, implementé también el consumo de probióticos sí o sí en mi dieta diaria.

Los probioticos son organismos vivos que ayudan a mejorar la digestión y salud intestinal, presentes en diversos alimentos como el yogurt, kefir, chucrut, quesos, kombucha… Sin embargo tendríamos que ingerir demasiado de estos alimentos para tener el mínimo necesario para funcionar bien. Por eso opté por ingerir el suplemento que restaure de una manera más acelerada.

Probé con varias marcas comerciales pero en algunas el contenido de microorganismos era demasiado bajo. Por azares del universo llevo algunos días probando Probiolog IBS 13.1 de laboratorios Mayoly y me ha sentado de maravilla, tiene un contenido elevado de probioticos de 3 cepas distintas +vitamina D, se toma súper fácil, es un polvito que sabe a frambuesa y me da toda la confianza al ser de uno del laboratorio más importante en el mundo especializado en los trastornos gastrointestinales. También puede ser tomado por gente que no padece SII con el fin de fortalecer si flora intestinal.

Probiolog IBS se encuentra facilmente en supermercados y farmacias. Investigando un poco más, resulta que la misma farmaceutica tiene tambien otros medicamentos para mejorar los síntomas como el Meteospasmyl.  Este último debe ser recetado por tu médico.

Este padecimiento es muy estresante para quien lo padece, pero en base a mi experiencia, es muy importante que no te automediques, que sigas las indicaciones del médico, que no olvides que hay una causa más profunda a nivel psicológico y que no te resignes a vivir con malestar, inflamada, sensible… Porque eso, sencillamente no es vivir.

 

 

5 respuestas a “Probioticos: Su importancia en tu salud intestinal

  1. Es horrible padecer esos síntomas… literal dejas de vivir, sin comer, he faltado al trabajo por la inflamación y el dolor. Ya me había dicho un médico que el consumo de probióticos es buenísimo, y también de Probiolog, empezaré a consumirlos ahora mismo. Gracias!!!! 🙂

    Me gusta

Deja un comentario